REVALORIZANDO COMUNIDADES Y TERRITORIOS

La zona costera de Usulután: Retos para la gobernanza ambiental territorial

02 de abril de 2012

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Autores: Rafael E. Cartagena,

Elías Escobar y Oscar Díaz

La Bahía de Jiquilisco muestra en el presente la superposición de distintas lógicas productivas heredadas de momentos distintos en la historia del territorio. Así, podemos encontrar los beneficiarios del Programa de Transferencia de Tierras, dedicados primordialmente a la seguridad alimentaria, las cooperativas de la Reforma Agraria de los años 80, dedicadas a la siembra de granos básicos y la producción de caña de azúcar; así como medianos y grandes propietarios que funcionan bajo la lógica del monocultivo y en estrecha vinculación con los ingenios azucareros. Además de ello, un conjunto de intereses de reciente aparición en torno al turismo y el desarrollo inmobiliario.

La gestión ambiental de un territorio diverso y complejo como este, necesita necesariamente de la participación de su tejido social del territorio. En el sur de Usulután, uno de los factores favorables a dicha colaboración es la existencia de organizaciones con mucha capacidad de propuesta, movilización y sectores comprometidos con la autogestión del desarrollo desde criterios de sostenibilidad ambiental y social.

Las respuestas sociales positivas a las variadas problemáticas ofrecen un “catálogo” de opciones que merecen ser potenciadas, y en ello trabajan decenas de ONG y agencias de cooperación que apoyan a las comunidades y organizaciones de productores del territorio. El Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales puede también incidir para que los éxitos y logros de la sociedad civil trasciendan el nivel comunitario y lleguen a tener algún impacto territorial.